sábado, 2 de mayo de 2015

DUELO
Podía sentir la presión en el pecho, cada latido de mi corazón acelerado, me costaba leer el  papel que tenía en frente, los temblores causados por el nerviosismo difuminaban la terrible letra que estaba a punto de leer. Mi madre, mi mas allegado familiar, había muerto, tras leer esto la presión en mi pecho se incremento como si mi corazón se tornase de plomo, mi visión se nublaba y mi equilibrio fallaba, y de repente negro, nada más que una obscuridad absoluta me envolvía, ¿Dónde se  encontraban las tristes paredes que me envolvían?, ¿Dónde se hallaba mi hermano?, mi hermano, ¿Quién era mi hermano?, no lo sabía, por más que intentaba despertar solo conseguía obscuridad, una terrible y fría obscuridad.
NEGACIÓN
Beige, ¿beige?, el techo, el techo de mi habitación era beige, ¿Cómo?, ¿un sueño?, claro, no podía ser verdad mi madre no podía morir, debía de ser un error, un fallo, un sueño, mi madre estaba sana no podía morir, estaba sana, ayer mismo comí con ella, pavo, un estupendo pavo, como ella lo solía cocinar, la carta debía ser una mentira, una ilusión, una carta, ¿una carta?, una carta se hallaba en mi regazo, comencé a leer, no podía ser verdad, la misma horrible letra que creí haber soñado se hallaba ante mi ahora, no, no, NO, no podía ser verdad, mentira, la letra se empezó a diluir, la tinta diluida comenzó a tornarse carmesí color de la sangre, ¿sangre?, la sangre comenzó a fluir hacia el suelo dibujando la horrible palabra que tanto temía, MUERTA.
NEGOCIACIÓN
No, ¿Por qué?, ¿Por qué la vida es tan cruel?, la vida, la vida no tenía la culpa, la vida era algo otorgado ligado a unas leyes, me gustaría poder hacer un trato, un pacto divino que me permitiera salvar a mi madre, un pacto, ¿con Dios?, ¿o con el diablo?, Lucifer era el más indicado para este tipo de tratos, obviamente sabia que esto no era posible, era mentira, esa clase de tratos no existen mas allá del cine o la literatura, esto solo logró reafirmar mi sentimiento negativo, tan solo trataba de evitar lo inaceptable con falsos tratos, esto era un fracaso.
DEPRESIÓN
Fracaso, esto era mentira, falsos tratos, las lágrimas que brotaban me ahogaban, me asfixiaban, me angustiaban, depresión, ¿Qué era la depresión?, la depresión es tan solo el resultado de la conciencia de lo ya perdido, no podía encontrar el coraje para afrontarlo, pero si bien podía sentir otra cosa, un fuego, ¿un fuego?, un fuego, un fuego que me quemaba, que me hastiaba en lo más profundo de mi ser y que ahora afloraba en mi.
IRA
Con gran furia salte de mi cama y lance todo lo que encontraba a mi paso contra la palabra dibujada en sangre en mi suelo, los jarrones, los libros, lanzados con tal furia que se desgajaban y se unían con la sangre, hasta que algo llamo mi atención, por el rabillo del ojo vislumbre una figura, mi madre, mi madre, de repente la carne se empezó a diluir, como la tinta de la carta, hasta que solo se veían los huesos, arremetí con gran furia e ira contra la figura tratando de borrarla a golpes, pero no lo conseguía, ¿Por qué vida?, ¿Por qué eres tan malvada?, maldita vida, Dios, ¿Por qué me has robado a lo que más quería? Maldito Dios, te odio, maldita figura implacable, te odio, te odio, TE ODIO, mis palabras fueron perdiendo fuerza, comenzaba a comprender, a entender, a medida que comprendía la obscuridad volvía, hasta envolverme por completo otra vez, negro, obscuridad.
ACEPTACIÓN
No veía nada, solo podía escuchar un repiqueteo en el fondo, como una luz a punto de extinguirse, tan efímera como la vida, mi madre estaba muerta, no podía hacer nada y huir de la realidad no funciona, por fin lo comprendía, aceptar la muerte era necesario para continuar viviendo, por fin pude abrir los ojos, para contemplar aquella luz, aquella bombilla que se extinguía, al girar la cabeza pude comprender mi situación, un pitido que media mis latidos me perturbaba, me taladraba, pero había algo que no encajaba, algo me molestaba, sabía que me había pasado, que había experimentado, una sensación que ya había vivido antes, había leído sobre esto, el duelo, las fases, la negación, la negociación, la depresión, la ira y la aceptación, ¿por la muerte de mi madre?, no, mi alma trataba de decirme algo, mi madre había muerto sí, pero hacia ya tres meses de eso, aquella carta, aquella carta que todos los días lea para tratar de evadirme de la realidad aquella vez paso algo mas, mi corazón fallo, quizás, mi alma, mi alma, ¿en duelo?, ¿por la muerte de mi madre?, no, por mi propia muerte, mi muerte, ¿estaba muerto?, no, todavía no, pero no faltaba mucho, al fin lo comprendía, mi alma se debatía en duelo por mi muerte, un pitido ininterrumpido me saco de mis pensamientos, por fin, todo acababa, todo se desvanecía, mientras mi vida se apagaba pensaba en las galaxias que recorrería mi forma incorpórea, las eras que vería, los cuerpos que ocuparía, en un mar de galaxias, en un mar de vidas, pero sin la muerte, todopoderosa, implacable, todas las vidas no son nada, da igual que seas rico, pobre, o el mismísimo rey, al final todos sucumben, todos caen, por fin pude articular palabra, para pronunciar, con mi último aliento, mis palabras finales, con las que concluiría mi historia, aquellas palabras que mi enfermero pudo escuchar, OMNIA MORS AEQUAT.